jueves, 28 de junio de 2012

Cien Discos Imprescindibles del Rock Internacional: Capítulo Nº2


Debido a la necesidad de incluir gran cantidad de discos, se me presentan dos alternativas. La primera consiste en extender mis publicaciones con el fin de que cada una abarque mayor cantidad de álbumes. La segunda tratar de publicar con mayor frecuencia pero manteniendo la longitud. Los dos caminos llevan a acotar en el tiempo la duración de la saga.
Siguiendo la creencia de que un post de mayor cantidad de palabras podría atentar contra la calidad del mismo y a su vez desalentar a posibles lectores, he decidido tratar de publicar más seguido. Digo tratar porque dependerá de varios factores no siempre controlados por mí.
Hecha la salvedad, pasamos a lo más interesante!

95 - Beggars Banquet - The Rolling Stones (1968)
Continuando la tradición iniciada en el post anterior, decidí abrir con un plato fuerte. Noveno disco de la banda en EEUU, octavo si contamos solo ediciones inglesas, significó el comienzo de uno de sus períodos más creativos. Jagger y los suyos venían de editar el año anterior Their Satanic Majesties Request, que intentaba subirse a la ola psicodélica, resultando un fracaso tanto comercial como artístico, con lo cual para su siguiente LP decidieron volver a las fuentes, y beber de las aguas del rock más crudo y un blues un tanto sucio. Cuenta en su haber con varios clásicos, como son Sympathy for the Devil, Street Fighting Man o Salt of the Earth. Un dato a tener en cuenta es que significó el último larga duración con el quinteto original participando a pleno, ya que para su sucesor Brian Jones estaría prácticamente fuera de la banda.

94 - Kill 'Em All - Metallica (1983)
Considerado uno de los primeros discos de thrash metal (versión del heavy metal caracterizada, entre otras cosas, por su ritmo rápido y agresivo), el debut de Metallica es uno de esos clásicos de escucha ineludible. El hit indudable del álbum es Seek and Destroy, perteneciente a la pluma de Hetfield y Ulrich, como la mayoría de los temas de la placa, compartiendo coautoría en alguno de ellos con Dave Mustaine, quién fue expulsado de la banda antes de grabar. Las canciones recorren temáticas muy metaleras como la guerra, la muerte y demás historias oscuras.


93 - Bad - Michael Jackson (1987)
El séptimo álbum del rey del pop es una catarata de hits, de esos que conoce desde una abuela a un nene de seis años, y hacen bailar a ambos por igual. Algunos ejemplos: Bad, The Way You Make Me Feel, Man in the Mirror, Smooth Criminal, y la lista podría seguir. La placa amalgama una importante variedad de estilos, entre los que se cuentan el dance, pop, funk, soul, R&B y hasta hard rock. Con Bad Michael consiguió ser el primer y único artista en lograr cinco números uno consecutivos en el top cuarenta americano, un record para nada despreciable. El larga duración es sencillamente uno de esos discos que todos debemos conocer.

92 - Hopes and Fears - Keane (2004)
Una de las principales características de este trío ingles es su atípica formación de voz, piano y batería. Con ella sorprendió al mundo a mediados de la primera década del siglo XXI, al editar su primer LP. El disco, orientado al rock melódico, produjo una considerable cantidad de éxitos: Somewhere Only We Know, Bend and Break, Everybody's Changing, Bedshaped y otros. Tanto el público como la prensa especializada lo recibió gratamente, convirtiendo a la voz de Tom Chaplin  y al piano de Tim Rice-Oxley en clásicos instantáneos, y valiéndoles la obtención de dos Brit Awards.


91 - Marbles - Marillion (2004)
Decimotercer disco de esta gran banda de rock progresivo. En esta oportunidad presentan una faceta más accesible, orientada a un soft rock, matizado con algo de pop. El álbum salió en dos versiones, una simple de doce temas y una doble de quince. Citando a su elector: "El trabajo en las guitarras de Steve Rothery en este disco está a la altura de David Gilmour". Si bien por tratarse de un LP de rock progresivo no cuenta con grandes hits, o por lo menos no son populares, un tema que se puede destacar sobre el resto es Genie. Si no los conoces o si oíste nombrarlos pero no escuchaste su música, es una buena puerta de entrada.


Ahora sí, me despido hasta la próxima! Espero que sea en poco tiempo.

lunes, 25 de junio de 2012

Cien Discos Imprescindibles del Rock Internacional: Capítulo Nº1


Para arrancar el listado, seleccioné discos de los más variados. Seguramente si participaste en la selección vas a encontrar que algunas de tus elecciones van apareciendo. Si no participaste, y habiéndolo hecho, no tuviste la oportunidad de escuchar alguno de estos discos (y los que vengan en los próximos posts) desde ya te recomiendo que lo hagas lo antes posible!
Aclaro nuevamente que no se trata de un ranking. Los números asignados a cada disco son simplemente una manera de ir ordenando las placas y para facilitar el seguimiento por parte del lector.
Bueno, ahora sí, basta de aclaraciones previas. Vamos a lo importante.

100 - Revolver - The Beatles (1966)
Existe un gran consenso alrededor de la excelencia del séptimo disco de los Fab Four. Es esta oportunidad los cuatro de Liverpool se adentran en la psicodelia, camino que profundizarían en LP posteriores. Con clásicos como Taxman (Harrison), Eleanor Rigby (McCartney), Tomorrow Never Knows (Lennon) o Yellow Submarine (Starr), entre varios más, es imposible no reconocerlo como uno disco indispensable en toda discografía que se precie. La revista Rolling Stone, en el 2003, lo catalogó como uno de los 500 mejores álbumes de la historia, en el puesto Nº3. Es un plato fuerte para comenzar con esta lista!

99 - Hunky Dory - David Bowie (1971)
El Duque Blanco del rock y del pop ha sido un gran artista, con grandes contribuciones al mundo de la música. En esta oportunidad nos quedamos con la primer placa que Bowie sacó a través de la RCA. La banda que participó en la grabación es la misma que la que un año después lo acompañaría en el clásico The Rise and Fall of Ziggy Stardust and the Spiders from Mars. Es destacable la participación de Rick Wakeman en el piano, cuyo virtuosismo se plasmaría años después en grandes discos de Yes, y de Mick Ronson en guitarra, asiduo colaborador de Bowie. La sola existencia del hit Changes es excusa suficiente para escucharlo.

98 - Into the Wild (OST) - Eddie Vedder (2007)
Primer LP del siglo XXI, y una de las pocas, sino la única banda sonora de la lista. No es novedad decir que se trata de uno de los cantantes más expresivos de los últimos veinte años, cantidad que lleva liderando Pearl Jam. Sin embargo, es su primer disco solista el que nos convoca hoy. Si hay un elogio que puede realizársele al álbum es que el film es mejor gracias a él. Entre sus grandes temas están Society (con una letra inspirada), Hard Sun y Guaranteed. Abundante en hermosas melodías, guitarras acústicas y consiguiendo una identidad propia (distinta a la de su banda), Vedder consigue un disco sin pretensiones, pero no por eso menos necesario.

97 - Play - Moby (1999)
El quinto disco de Richard Melville Hall, fue un éxito masivo que catapultó una carrera que si bien promisoria, aún no había despegado. La placa combina la música electrónica y el house con distintos ritmos antiguos como el folk y el gospel, generando una mezcla adictiva. Canciones como Porcelain, Natural Blues, Why does my Heart Feel so Bad? y Run on, fueron lanzados como sencillos con muy buenos resultados. Como novedad, fue el primer LP en tener licenciados todos sus temas para utilizar en películas, show de televisión o publicidades, siendo un elemento decisivo a la hora de promocionar la placa. Un nuevo clásico.

96 - Images and Words - Dream Theater (1992)
A poco de empezada la lista, es prometedor que se cuele el metal progresivo. El segundo disco de Theater, es también el primero del cantante James LeBrie, voz que forma parte de la banda hasta el presente. Cualquier disco que cuente con la participación de grandes instrumentistas como John Petrucci (guitarra) y Mike Portnoy (batería), merece, a priori, ser escuchado. Si a ese combo le agregamos grandes temas, el coctel es explosivo. En palabras de su elector: "por todo lo que significó para el metal progresivo, este es un sí o sí". Los hits: Pull me Under y Metropolis Pt. 1: The Miracle and the Sleeper. Un buen punto de partida para adentrarse en el género.

Esto es todo por hoy. Los espero en la próxima entrega. Mientras tanto, tienen tiempo para ir escuchando.





jueves, 21 de junio de 2012

Cien Discos Imprescindibles de Rock Internacional: Prólogo



Durante los siguientes post vamos a recorrer cien discos considerados de escucha imprescindible en lo que a rock internacional se refiere. La selección no estuvo a cargo solamente de mi persona, sino que se trata de un esfuerzo conjunto, ya que fui solicitando la participación de amigos, y de uno de mis hermanos.
El resultado tiene que ver con el gusto de distintas personas, que en algunos casos es coincidente y en otros sumamente divergente. Por supuesto no se trata de una selección definitiva, ni de un ranking, sino una simple enumeración de discos, que un pequeño grupo de personas considera importante escuchar.
Obviamente, y dado el recorrido musical de cada uno de los electores, hay grandes bandas ausentes. Agrupaciones importantes en la historia del rock, no van a ser de la partida. Para mantener el suspenso sobre la elección no voy a dar nombres.
Por otra parte, cabe destacar que al mencionarse una gran cantidad de discos, hubo que descartar algunos, y para eso traté de seguir ciertas reglas, algunas objetivas otras no. Por un lado eliminé de manera automática todos (o casi todos) los compilados, la razón radica en que en la mayoría de los casos preferí darle preeminencia a obras engendradas por los artistas de acuerdo a sus deseos y posibilidades, y no a ediciones realizadas por discográficas, mayormente movidas por el afán de incrementar sus arcas. Así quedaron afuera algunas selecciones, como un grandes éxitos de Elvis, Time Flies de Oasis, o Hey! Ho! Let's Go, una antología de los Ramones.
Superado este filtro, y aún presa de la necesidad de reducir discos, me guié por mi gusto personal. De esta forma se fueron álbumes de la talla de Like a Virgin de Madonna (elección por demás polémica), Black Celebration de Depeche Mode o The Visitor del grupo de rock progresivo Arena, entre otros. Demás está decir, que me fue bastante difícil llegar a la lista final.
Bueno, basta de previas, me retiro a preparar el próximo post en el que daré comienzo al listado de acuerdo a su configuración final. Los espero.

jueves, 14 de junio de 2012

Amando a García


No me acuerdo cuando fue la primera vez que escuche un tema de Charly. Era muy chico. En mi casa siempre hubo dando vueltas algunos cassettes y LP suyos o de Sui Generis. Lo que si me acuerdo es que tendría diez años cuando me convencí de que García era (y sigue siendo) un genio. De la mano de un amigo, que ya era fanático en esa época, empecé a descubrirlo, sobre todo a partir de Sui Generis, como si seguir el orden cronológico de su carrera me ayudase a entender mejor. Con su época solista ya estaba familiarizado, y el click definitivo lo hice unos (pocos) años después al conocer a Serú Girán.
Por supuesto que con el correr de los años su obra se fue resignificando, al menos para mí, ya que no es lo mismo escuchar una canción a los diez que a los veinte años. Mas allá de las grandes melodías, y los estribillos instantáneos, sus letras siempre me parecieron demostrar una inteligencia singular. Pocos artistas lograron exponer sus demonios, crear conceptos, y ser cronistas privilegiados de su época como lo fue García. Ha dejado un sello indeleble, y su influencia se puede rastrear de un sinnúmero de bandas del rock de acá.
Desde aquellos años en los que debutó, siendo adolescente, en Sui Generis, banda insignia del segundo ciclo del rock argentino (ese que vino después de la primera oleada de Almendra, Los Gatos y Manal), Charly no ha dejado de producir grandes obras.  Sus bandas tuvieron vida efímera, menos de cinco años (con reunión casi treinta años más tarde) para Sui (folk) junto a Nito Mestre, con un saldo de tres discos de estudio (uno mejor que el otro) y un triple en vivo; dos años para La Máquina de Hacer Pájaros, su experimento progresivo, en compañía de Carlos Cutaia, Gustavo Bazterrica, José Luis Fernández y Omar Moro, dejando como legado dos larga duración bastante subestimados en esa época; y otros gloriosos cinco años (con regreso una década después) con la que es para mí una de las mejores agrupaciones de nuestro rock, Serú Girán, junto a Moro, Lebón y Aznar, componiendo cuatro discos geniales, y editando uno en vivo (luego vendría otro de estudio y dos vivos más).
Mención especial merece su carrera solista, cuyo período de mayor esplendor, siempre a mi entender, está comprendido en el quinquenio 82-87. Aunque García siguió haciendo discos de elevada calidad durante la década del 90, y entrado el siglo XXI.
A través de su extensa trayectoria, el hombre del bigote bicolor ha logrado reunir y maravillar a varias generaciones con su talento. Ver a padres (algunos seguramente ya abuelos) yendo a recitales con sus hijos, o disfrutando de las mismas canciones es algo que no tiene precio, y que pocos artistas consiguen. Por esto también merece mi admiración.
Hace casi un año y medio que escribo en este blog y aún no le había dedicado ningún post a uno de mis ídolos en cuanto a música se refiere. Esta entrada intenta reparar ese error. Espero que también sirva como puerta de ingreso para neófitos.

domingo, 3 de junio de 2012

Cacerolas, nada...


El jueves y el viernes pasados se dio un hecho infrecuente. Algunos representantes (si es que les cabe esta aseveración, digamos mejor integrantes) de la clase media y media alta, salieron a las calles de sus barrios golpeando sus cacerolas en signo de protesta. No fue una manifestación masiva, ni ocurrió en todos los barrios. Principalmente abarcó los desfavorecidos barrios de Recoleta, Belgrano, Palermo, zonas de Caballito, es decir, donde se concentra la mayor riqueza de la ciudad. Y por supuesto recibió una importante cobertura mediática. No tiene punto de comparación con lo sucedido más de diez años atrás en ese aspecto.
En lo que si se parece a lo ocurrido en aquel ¿lejano? 2001 es en las causas de la modesta movilización. Parece ser que estas clases solo se movilizan cuando les tocan el bolsillo. Ni más ni menos. Corralito alguna vez, imposibilidad de comprar dólares ahora. Parece que el egoísmo es el principal motor en nuestro país, llevando a una clase, que ha sido incapaz de reaccionar cuando la pobreza y el desempleo eran la regla (y aún en muchos estratos lo son) en tanto y en cuanto sus miembros disfrutaran de crédito barato o tuvieran la posibilidad de viajar al exterior, a protestar solo cuando se siente tocada.
Clases cómodas, que quieren ser pero no son, que prefieren ignorar la realidad más cruda en pos de su bienestar. En este punto es necesario establecer un paralelismo casi obligado con la, también reciente, protesta del campo en la provincia de Buenos Aires. Campo que se vio favorecido durante casi los últimos diez años por los altos precios internacionales y la política cambiaria del gobierno, y no quieren aceptar el aumento de un irrisorio impuesto inmobiliario. Me pregunto, ¿cómo imaginan estos señores que la redistribución puede llevarse a cabo, si los que tienen un poco más no contribuyen para paliar la situación de los más desfavorecidos? ¿por qué es que nunca escuchamos a representantes del la clase media y alta, tanto citadina como rural, pedir justicia social? Mi ingenuidad se revela enorme al enunciar estos interrogantes.
No quisiera concluir sin antes aclarar que lo expresado en los párrafos precedentes es solo una opinión, y que de ninguna manera estoy en contra de que cada ciudadano exprese libremente sus reclamos. Por otro lado, en un contexto de deterioro de la situación económica general, y en el que muchas de las decisiones tomadas por nuestros gobernantes son sumamente cuestionables, la protesta es un buen mecanismo para hacerles saber nuestro desacuerdo. Sin embargo, habiendo tantas cosas que reclamar, que poner sobre el tapete, nuevamente elegimos la más egoísta.