Cien Discos Imprescindibles del Rock Internacional: Capítulo Nº6

Lento pero parejo nuestra interminable lista sigue avanzando. En esta oportunidad llegamos a la primera treintena. Hoy se develaran cinco incógnitas más. Espero que la curiosidad de los lectores se despierte al encontrar discos desconocidos y les sirva para abrir su panorama. Desde acá hacemos lo posible para que eso suceda.

75 – Wish You Were Here – Pink Floyd (1975)

El noveno disco de la banda de Gilmour y Waters es una obra maestra. Compuesto de solo cinco tracks, exploran temas como la industria musical, la ausencia y la locura. El excelente tema Shine on You Crazy Diamond, divido en dos extensas partes, es un homenaje que el grupo decidió hacerle a su primer líder, Syd Barrett. Cuenta la leyenda que un irreconocible Barrett, con sobrepeso y pelado, se hizo presente en el estudio durante la grabación, para sorpresa de sus ex compañeros, que tuvieron serias dificultades para reconocerlo. Además de la pieza mencionada, Have a Cigar, Welcome to the Machine, y Wish You Were Here son las canciones que integran el clásico larga duración. Corré a comprarlo!

74 - Songs of Faith and Devotion - Depeche Mode (1993)

El grupo inglés de música electrónica sorprendió a propios y ajenos despachándose con una placa (la octava en su discografía) fuertemente influida por el blues, el gospel y el grunge, tan de moda esos años, intentando buscar sonidos más orgánicos. A pesar de no notarse por el excelente resultado obtenido, la grabación del LP fue un tanto caótica debido principalmente al estado narcótico del cantante David Gahan, y a la desidia del guitarrista Martin Gore. La obra representa el cierre de la etapa más fértil en la carrera del grupo, iniciada en 1984 con la edición de Some Great Reward. Entre los sencillos lanzados se destacan Walking in my Shoes, I Feel You y In Your Room. Oscuro y atrapante.

73 - All is Violent, All is Bright - God is an Astronaut (2005)

Se trata de una banda irlandesa de post rock instrumental integrada por Torsten Kinsella (guitarra), Niels Kinsella (bajo), y Lloyd Hanney (batería y sintetizadores). Su segundo disco tiene diversos matices que nos llevan desde tranquilas melodías a intensas descargas de energía. De acuerdo a la opinión de su elector el sonido de la banda es "muy pero muy melancólico. Hermoso". Con el simple Fragile, tema que abre el álbum, lograron tener cierta rotación en las cadenas europeas de MTV. El disco cuenta con diez temas y una pieza oculta, llamada Halo of Flies. Si tuviéramos que señalar un tema como el emblema del LP, nos quedaríamos con Forever Lost. Para oídos atentos.

72 - Who's Next - The Who (1971)

Lo que se iba a transformar en la segunda ópera rock de la banda, titulada Lifehouse, devino un proyecto frustrado, que llevó a Townshend y los suyos a su quinto larga duración. Considerado uno de los mejores álbumes del grupo, presentó un sonido novedoso, gracias a la utilización de lo que en ese entonces era un novel invento, el sintetizador. Esto se escucha claramente en los mejores dos temas del disco, Baba O'Riley y Won't Get Fooled Again. Otras grandes piezas de la obra son Bargain, Behind Blue Eyes y My Wife (único tema que no compuso Townshend, nacido de la pluma de Entwistle). Es el primer LP en el que los británicos lograron plasmar su exuberante energía del vivo en una placa de estudio. Indispensable.

71 - Rust in Peace - Megadeth (1990)

Los liderados por Dave Mustaine no solo se despacharon, en su cuarto disco, con uno de los mejores álbumes de thrash metal de la historia, sino que estrenaron su formación más exitosa y extensa, que incluye además de al colorado, a Ellefson, Menza y Friedman. La placa pertenece a un período de sobriedad y desintoxicación de Mustaine, viéndose claramente reflejado en el gran resultado final. En clásicos como Hangar 18, Tornado of Souls o Holy Wars se manifiesta la impecable técnica del guitarrista Friedman. Take no Prisoners y Five Magics son otros de sus grandes temas. La guerra es la temática que recorre todo el LP. Adrenalínico.

Así llegamos al final del capítulo. Arriba quedan cinco nuevos discos, de bandas que nunca habían aparecido en la lista hasta el momento. Ahora solo queda la música. Hasta la próxima.